Es una sensación tan extraña. Debo haberte arrebatado tu libertad. Tus queridos ojos verdes. Aunque yo los vea azules. Y a mí me causas pena, tristeza, me causas muchísima lástima porque puedo sentir cómo te sentirías tú si a mi me quitaran justo ahora lo más valioso que tengo.
Sin embargo yo tengo más cuidado con esas cosas. Aunque sé que no sé nada, aunque sé que no puedo comprenderte.
Solo puedes saber mi nombre, y mis apellidos. Una foto mía. Dos comentarios sin importancia. Tres rumores de fuera. Cuatro voces que tu conciencia diga. Nada más.
Eres lista. Lo sé, y no lo pongo en duda. Pero hay algo en tí que falla, y hay una parte de mí que quiere que cambies, pero hay otra que no, es egoísmo? Ahora tú le perdiste, yo le gané. Pero me da miedo que las consecuencias sean peores para tí.
Lo peor de todo es que la entiendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario