Me usas para tu propio beneficio. No te importo. Cuando yo
era un vehículo para llegar hacia ella, bien aprecio me tenías, aprecio que
ahora noto que no era más que una gratitud superficial, egoísta no más que para
sentirte bien consiguiendo tus metas. Cuando la tuviste, me cuidabas, no por la
que yo era, sino por lo que significaba ser su amiga para ti. Ahora que has
mostrado tu verdadera “identidad” si es que la tienes, y ya no la necesitas a
ella, sólo a él, ahora, solo soy un estorbo para ti, le quito el tiempo que tú
puedes pasar con él, pero yo sigo siendo la misma. Lo único que ha cambiado ha
sido tu condición, y tu persona, te has topado con la realidad de cabeza, estás
viendo que la gente puede ser más feliz que tú, y que lo que tienes ahora no es
mucho. Me estás tratando como la mierda a escondidas, y como una más a ojos de
él, aquel amigo que para ti es el más importante, la persona más importante
para mí también. No te lo voy a quitar, no soy como tú. Si es a lo que tienes
miedo. No. Yo soy mucho más justa y doy lo mismo en todas mis relaciones
sociales. Estoy harta de que me escupas la cara a escondidas, de que no me
digas nunca lo que piensas ni aunque te lo pregunte. Que hacerte el tonto se te
da de maravilla. Estoy muy harta de ti. De cómo te estás comportando. Conmigo y
con las personas más importantes de mi vida.
Ojalá leas esto algún día y te sientas identificado, porque si es así me alegraré de saber que te has dado cuenta de que eres así.
Ojalá leas esto algún día y te sientas identificado, porque si es así me alegraré de saber que te has dado cuenta de que eres así.