Y hasta que no me sincero no me doy cuenta de que las cosas son más fáciles de lo que parecen. Simplemente el capricho te puede llevar a situaciones similares. Voy sabiendo diferenciar lo que es oportunidad y experiencia, de lo que es verdaderamente algo más serio.
Sin embargo me gustaría no tener que volver a pasar por la misma situación. Me volví a equivocar, en el mismo mes dos veces. El más tonto tenía razón. Pero podía haberse evitado si no hubiera sido por la tontería que ha hecho, que de todos modos me ha hecho ver las cosas con más claridad, no es lo mío, no es el mío, al menos ahora. Y aunque en aquel rincón de mi cabeza siga estando la esperanza, mi conciencia me dice que la cosa no va a cambiar. Ahora que recopilo, las cosas no me saben demasiado bien, algunas palabras las necesito re entender, aquellas que en esos tiempos me resultaban inútiles.
Escucha:
Me tendrías que haber dicho desde un principio la verdad. Aquella estúpida verdad para no llegar a lo que he llegado, una mezcla de hormonas revolucionadas y necesidad de disfrutar el tiempo. Fuiste el único refugio de mi libertad, que no la pude hallar del todo, y ahora me doy cuenta que estaba encarcelada, no era verdad lo que sentía. Y la personalidad que adjudiqué volvió a ser errónea, para no variar.
Sin duda necesito a alguien pero ya. ¿No sé vivir sola? Qué horror!
1 comentario:
muheR eso no se pone tan deseperaa no taas! jaja no seas tonta, vive los momentos y haz siempre lo qe quieras ;)
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